
Rojo como la sangre

Saltamontes ¿Has crecido? No lo sabes, hay tanta piel y tantas palabras, tantos colores, puedes cerrar tus ojos y ver a un Warhol todo poderoso que sonríe y saca la lengua. El miedo es real, tanto como la saliva, las uñas son estériles, y hay quienes las comen para sentirse mejor, otros simplemente se van de putas.
las palabras nerviosas que me llegan de ti, dan cuenta de que existes, o que al menos no eres tan irreal, la sonrisa y el aliento, soy tan joven como una pirámide y pequeño como un respiro, suelo entrar en las más profundas alucinaciones de quien no quiere pensar, y sé, que muchos caminan por compromiso, pero hasta ese acto vacuo y variable es mejor que el rígido contar idiota del calendario. Acércate lo suficiente y verás puntos, me acerco a ti y ese espacio me da cuenta de tu presencia, como cuando escapas, o como cuando vas a las nubes.
¿Has llegado tarde? Te espera la música que ya he oído, Joplis, Piaf y un animla sordo. He pasado por una calle, una niña sentada, un chico y una guitarra, el sacaba notas simples, ella reía, si, ella reía. Reía de él y de si misma, claro. Puedo recordarte que no cambiamos, mi pelo era enredado, yo era más flaco, no cambiamos, solo ahora es menos cabello y piel que no huele.
Nena, no sé si recordarte que un simple contacto puede ser un estallido, que una bomba de hidrógeno como el mal aliento y tu pelo, como tu pelo, solo eso. Alguien puede hundirse en él, será fe-liz si lo hace, puedes tomate un whiskey, dejar que las cosas pasen, nena, un contacto también puede ser nada.
Pequeño saltamontes ¿El tiempo? sabes nada de nada.
Cuando se escribe de viento en la cara, de los largos caminos, de desnudarte en el zaguán sin quitarte la ropa, de vida y fornicación. ¿Hablas?, si cierras los ojos, ciérralos y sigue con tu mano sobre el mouse... Saber que no soy el bueno, ni el malo, que no hay bueno ni malo y eso aún es peor. Que los sueños no son sueños, que son las metáforas e ilusiones que no te atreves a decir. De tus miedos y verdades. De la ignorancia, de la vida nuevamente, pues siempre es la vida. De la poesía y la ingeniería, casi nunca es la ingeniería. De la reina madre, de la música y nuevamente de la vida, de las niñas, nuevamente de las niñas de la supuesta intelectualidad de algunos, de los chispazos de saliva que se les salen cuando dicen a boca llena palabras estúpidas. De lo que se siente a veces, de la leche en la nevera, de desnudarte en el zaguán o en el sofá y esta vez si quitándote la ropa, de hablar por MsN y saber que suele ser nada, de tantas cosas como de ti y de mí, de las cosas que se nos parecen, de las cervezas y del vino, de los tangos desesperanzados, de hacerse viejo, de que ahora te des cuenta y recuerdes que eras pequeño y que entre sollozos digas que esa era una linda canción, que bueno que ya no lo es pero que cuando la escuchabas de pequeño parecía muy "mona", de una peli que te recuerda al viejo, a ese viejo tuyo o un trozo de libro que ahora no le miras la historia sino la métrica y el estilo de composición, pendejadas que al final no te sirven, que te ríes de ti, que imaginas a tu sonrisa como una mujer bulímica. Que hace ratos no escribías por perder tiempo en nada, porque el tiempo que no se cuenta y del que no quedan resultados es nada. De que ahora una canción zumbe en tus oídos, que si un cantante es mejor que otro, que si ya escucho canciones de amor o no. que si un coro de Def Leppard ya para ti o para ninguno es interesante, si alguien lee que no tienes razón, que no hay un solo pensamiento con razón absoluta, ni siquiera la frase que indica esa afirmación. Que no tenga punto lo que escribas, que una nena en MsN ahora aparezca con una foto de tom Crouise en su perfil, que todo el mundo ya si se chifló. Que tienes 23, pero sería igual si fuesen 32. Que como terminas lo que ya comenzaste a decir, que recuerdas a bukowski, entonces como él, o como uno de sus poemas, te quedas callado.
Me pregunto si la magia existe. Y si las canciones de amor y el mismo amor son una burla de nuestros sentidos en contra de nuestros delirios, si el caso en que no sabemos nada de nada y por tanto lanzamos balbuceos que traducen nuestra desesperación. Sentirse solo querida amiga, y más que solo, aislado. A veces (más de las que me gusta admitir) me siento así. Siento la presión de estar hundiéndonos. Pero, de momento no puedo hacer nada.
En tu mente discurren tantas cosas, las buenas, las malas, las limosnas, el sexo y el ajedrez, está el blog en qué publicas, los semáforos, los pianos, la cara aquella qué no quieres qué se te olvide, la voz tosca y la demasiado agradable. Está es signo de interrogación grande y majestuoso siempre presente. Sientes cosquillas en los pies, Quizás no sea tan bueno hablar tanto, no sería bueno tampoco escribirlo. Notas qué hay quienes “Aman” a todos, unos a hombres por igual, otros a mujeres, algunos a los dos anteriores. Un mundo que se pone descolorido con tanto enamorado. Miles de estrellas son regaladas en noches tachonadas de imaginación, quienes reciben estrellas, se iluminan y encuentran ya otra posesión para ellos.
Vendedores de flores y chocolates se alistaron en el afán mendigo de un día en qué todos buscaban razones para dejar de lado la soledad. ¿Por qué así? Buscan el amor, el tema qué ahora traemos. La música, la poesía, y hasta la muerte se mezcla con el amor, como el amor de Julieta, werther o el de Alejandra, como el tuyo ¿?.
Why can't we give love that one more chance?
(…)Give love give love give love give love give love?
Cause love's such an old fashioned word
And love dares you to care
For people on the edge of the night
And love dares you to change our way
Of caring about ourselves
Mira tus manos, están intactas aún? Eres aún de hueso? ¿Puedes dar oportunidades? Es solo qué sientas los murmullos para que comprendas… ¿puedes pararte al filo de la oscuridad? Tus miradas se van desvaneciendo en el viento, cada una a su momento, puedes gritar y rezar, puedes ser cilíndrico o triangular. No te veo como solía hacerlo, leo las palabras salidas de tu nariz. El frenesí del parpadeo, la inconstante saliva en la boca, ¿puedes sentirla ahora?
Cae la noche y me dispongo regresar. No sé de que extraña mezcla está hecho mi corazón querida amiga, suelo arrancarlo, entregarlo, y este en minutos está listo para la misma operación. Por ejemplo, me enamoré de la mujer que lucía sus cabellos negros, largos y sueltos sobre el Mercedes-Benz plateado que frenó en el semáforo cuando yo cruzaba la calle, aunque luego, la mujer de la venta de bisuterías me cautivó profundamente. Llego a casa, me tiro en el sofá, dejo que suene la música, quizás algo fito, U2 o Led zeppelín y sin darme cuenta me quedo dormido.
Espero, tu suerte y la mía se crucen por allí. Pueda mirarte de frente y tú hagas lo mismo. No tengo mas para decir hoy o si tengo pero no deseo hacerte el cuento muy largo. Ten un buen día.
Siempre tuyo,
Yo.