¿Existe acaso el espíritu de las naciones? ¿Existe una forma particular de ser nosotros? Quiero creer que no, que no existe una red invisible que nos une y nos hermana por el simple hecho de compartir el mismo espacio, el mismo aire. La cuestión es que si sí hay una forma particular de ser lo que somos, estamos casi en el fondo del charco y sin posibilidades de salida. Nuestras derrotas están siempre marcadas por un brillo de ingenuidad, por un anhelo de gloria, de un «casi» eterno, de una palmada en el hombro o de un triste y melancólico «la próxima será». Por otra parte, nuestras victorias son siempre pírricas o están cubiertas por un manto de duda o deshonestidad. Si tenemos una forma común de ser lo que somos es entonces la de un espíritu tibio y desagradable de cualquier modo. Estamos, de alguna manera, condenados a la ambigüedad y al desconcierto. Y ni en ninguno de nuestros momentos, de nuestros mejores momentos, hemos sido capaces de tomar una posición clara, una posición propia. Estamos siempre dispuestos a pensar de oídas como si viviéramos en cueva oscura de la que nunca hemos salido y por tanto, no hemos visto el brillo del día que nos espera afuera. Una lástima.
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Estoy escribiendo a buen ritmo, casi todos los días, varias horas por las noches. En breve, de seguir así, tendré completo Desde el infierno, con amor. Sí, ese proyecto cyberpunk que comenzó como una blognovela y que dejé tirado a mitad de camino por mucho tiempo. La cosa va así: un pequeño proyecto del que publiqué nueve entradas, nueve capítulos muy cortos y que esperaba concluir al llegar al número catorce. Hoy esos catorce capítulos consiguieron convertirse en veinte que publicaré en un solo volumen a finales de abril. Al menos ese es el plan. Ya veremos qué pasa.
Nos seguimos leyendo.
Nos seguimos leyendo.
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Imagen: Vía Sanat Karavanı
Escribir te limpia el alma....yo no podría escribir un libro tan solo con pensarlo la soledad me agota.
ResponderBorrarPor eso me gusta un blog porque los textos son cortos te comunicas y entra el sol por la ventana
Te felicito lo estas logrando
ser escritor no es ser blogger
es mucho mas difícil que eso
Siempre queremos comunicar, queremos algo más que no tenemos al alcance. Por eso escribimos. Lo de ser blogger también tiene su truco y dificultad, pero también su encanto. Por otra parte, escribir ficciones sí es otra cosa, necesita, entre otras muchas cosas, la disciplina de caballo de competencia. Gracias por pasar.
ResponderBorrarNo leo mucho .Investigo en Google es mi pasión. No me gustan las novelas , me aburren ...Y si un texto es muy largo le digo adiós...
ResponderBorrarNo tenemos tiempo cuando somos bloggers de pasarnos los minutos leyendo blogs....
Tenemos poco tiempo para leer todo lo que hay. Tener un blog quita tiempo y no nos queda lo necesario para leer el Ulises. Yo también he ido dejando de lado los texto demasiado extensos. Eso sí, hay unas muy buenas novelas que merecen nuestra dedicación.
BorrarHoy, después de tanta ausencia, quiero agradecerte, porque desde hace un tiempo ando envuelta en esa bruma que llaman rutina. Se me olvidaron las cosquillas que en mi corazón deja el placer de leer cosas como las que tu escribes y sobre todo de escribir. Gracias por recordármelo. Espero paciente desde el infierno.
ResponderBorrarMi querida Sandra, la rutina siempre nos lleva ventaja, no se cansa, es diaria. Sin embargo, siempre tendremos los libros, las lecturas, los amigos. A mí también, por poco y se me olvidan estas cosas que nos alegran, pero aquí estamos.
Borrar'Desde el infierno, con amor' ya está caliente.
Un abrazo.
Me pasa igual. En los últimos años, con el auge de los blogs, he leído pocas novelas. Internet propone otro tipo de literatura, pero lo mejor es escribir lo que a uno le gusta.
ResponderBorrarMuchos éxitos, Miguel.
Abrazo.
Escribir lo que nos gusta, esa es la idea.
BorrarGracias por pasar.
Nos seguimos leyendo.